Resulta que un migrante mexicano fue interceptado por la patrulla fronteriza de estados unidos, y éste, al verse descubierto se regresa a México y al llegar a el límite, junto a la cerca divisoria, un grupo de personas que estaban del lado mexicano les arrojó piedras a los patrulleros y uno de ellos disparó su arma hacia el grupo, hiriendo de muerte a Antonio Pérez Ramírez, de 20 años de edad, originario del estado de Veracruz, que muere al estar recibiendo atención médica en un hospital.
El Gobierno mexicano, como siempre, muestra su indignacion ante el hecho, con una tibia carta de protesta, en la cual se insiste en que el mexicano muerto estaba en territorio nacional mexicano y exige ademas que se investiguen los hechos y se levanten cargos contra el responsable.
Este hecho , de ninguna manera es un hecho aislado, es una táctica que esta usando la patrulla fronteriza, para, por medio del terror, tratar de controlar la región de la frontera, no es la primera vez que responden con balas a las piedras, de los migrantes que hartos de tanta prepotencia y abuso de autoridad, tratan de defenderse.
Estamos a escasos dias del Día del Migrante y las cuentas que se presentarán son muy malas, cero acuerdo, cero convenios binacionales, aumento de la violencia en las fronteras, aumento de los migrantes, aumento de los niños migrantes.
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