Les comento que el Centro Madre Assunta continúa albergando
mujeres y niños migrantes, que en su búsqueda de mejoras para ellas y sus
familias, quedan atoradas en la Ciudad, sin familia ni amigos y en general
quedan sin dinero para continuar o regresarse, es cuando nuestro albergue,
regido por las Hermanas de San Carlos Borromeo-Scalabrinianas, ofrecen toda su
vida para crear un recinto de reposo donde puedan cargarse nuevamente de
energía y continuar en su peregrinas hacia su Tierra Prometida.
Estamos recibiendo mucha gente del sur de la República,
huyendo de la violencia, viviendo aún la violencia en su Stress Postraumático, generando
mucha ansiedad, depresión, pérdida de sus valores como personas, por lo que aquí
son tratadas por medio Trabajo Social, Psicología, Médicos, Abogados, etc, para
sanar su espíritu y puedan continuar sus búsquedas.
Hay un fenómeno que se está haciendo muy frecuente y es las
personas que llegan a ésta frontera a solicita Asilo Político para que en
Estados Unidos les sean protegidos sus Derechos Humanos, la gran mayoría no
logran el asilo porque no tienen como demostrar daño a su persona, persecución,
maltrato continuo, etc y son regresadas.
Las hermanas Scalabrinianas está solícitas a prestar sus
servicios a todas ellas de manera gratuita, dando mucha importancia a la salud
mental de los menores que acompañan a sus madres.
Esperamos aún la tan citada reforma migratoria, aguantamos
los embates económicos y aquí estamos.
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